Las lámparas de fragancia, además de perfumar de una forma duradera y homogénea, sanea el ambiente de tu casa, oficina, despacho, tienda… eliminando bacterias, mohos, ácaros del polvo, humo del tabaco y olores desagradables, siendo muy recomendables sobre todo para alérgicos.
La piedra catalítica caliente purifica el aire eliminando los contaminantes que se transportan por el aire. Al mismo tiempo esparce su agradable fragancia por la habitación.
Las lámparas de fragancia, también conocidas como lámparas aromáticas o lámparas catalíticas, se utilizan desde hace un siglo y representan calidad, lujo y, sobre todo, estilo.